La Liga Nacional a través de un comunicado ha informado que Wilfredo Guzmán sigue en el cargo

San Pedro Sula, Honduras

Seis equipos de la Liga Nacional mediante una carta desconocieron a Wilfredo Guzmán como presidente del organismo deportivo y en su lugar argumentaron que el nuevo jerarca era Héctor «Lin» Zelaya, quien funge como vicepresidente.

Marathón, Platense, Vida, Honduras Progreso, Real de Minas y Real Sociedad fueron los seis clubes que pidieron a «Lin» Zelaya convocar a una sesión extraordinaria para tratar temas importantes para la reanudación del fútbol y la reacción de la Liga fue inmediata.

Vea además: Presidente del Barcelona contra Arthur Melo: «“Lo que ha hecho Arthur es una falta de respeto”

“Nuestra institución continúa operado con normalidad, en legal y debida forma, buscando a través de su presidente Wilfredo Guzmán, las mejores alternativas para el pronto retorno del fútbol a las canchas hondureñas, respetando las medidas de bioseguridad y atacando las disposiciones de las autoridades gubernamentales”, dice parte del comunicado.

“Reiteramos que el presidente Wilfredo Guzmán continúa al frente de la institución y hacemos un llamado público a todos los sectores a unificar esfuerzos, dentro del respeto, la tolerancia, y el diálogo sincero, a fin de encontrar mecanismos que nos ayuden a enfrentar la crisis provocada por la pandemia del covid-19”.

“Es el deseo de nuestra Liga que los hondureños podamos reincorporarnos lo más pronto posible a nuestras actividades normales y que Dios nos conceda la serenidad para poder superar las pérdidas, tanto humanas como económicas provocadas por la pandemia.

Le interesa también: Paulo Dybala recibe el premio de mejor jugador de julio en la Serie A

La petición de los equipos fue aduciendo la supuesta falta de acción del dirigente Wilfredo Guzmán, en su cargo de presidente.

Antes de solicitar a “Lin” Zelaya, que gestione como presidente por ley, estos equipos sumado Motagua, enviaron una carta a Guzmán donde le daban un plazo máximo de 48 horas para renunciar a su cargo aduciendo incapacidad para estar al frente del organismo deportivo.