Cremona, Italia

El Cremonese, equipo revelación de la Copa Italia que ha eliminado a Roma y Nápoles para llegar a semifinales de la competición, sucumbió este sábado ante el Lecce (0-2) y alarga su maldición en la Serie A, en la que no conoce la victoria.

La tarde que prometía ser la indicada, la definitiva, esa en la que por fin el Cremonese estrenara su casillero de triunfos en la Serie A tras 26 años de ausencia en la máxima categoría del fútbol italiano, se convirtió en una más para la afición de los «grigiorossi».

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Una derrota más. Esta vez ante el Lecce del francés Samuel Umtiti, otro recién ascendido. Y ya van trece. Ni si quiera el impulso de la hazaña histórica de eliminar a Nápoles y Roma en la competición copera dio alas al Cremonese en liga.

El equipo norteño, que desde la llegada del italiano Davide Ballardini da la sensación de haber dado un paso adelante, se convierte en una sombra de lo que demuestra en Copa. Sin solidez defensiva, sin chispa en ataque.

Aguantó en casa durante la primera parte. En la segunda se le vino todo abajo. Primero con el gol del italiano Federico Bascchiroto encajado en una jugada a balón parado y más tarde con el definitivo del brasileño Gabriel Strefezza, a falta de 20 minutos, que mató el partido.

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Colista con ocho puntos, se queda el «matagigantes» copero a diez de la salvación con un partido más, mientras que el Lecce suma ya un colchón de diez sobre el descenso.

Los de Cremona (norte) tienen muy complicado salvar la categoría. Han apostado todo a la Copa, que podría convertirles en equipo de Liga Europa estando en la Serie B.