El futbolista reconoce que nunca le ha quedado grande ninguna camiseta que ha defendido en el fútbol hondureño

Tegucigalpa, Honduras

El defensor hondureño, Johnny Leverón, realizó su primer entrenamiento como jugador de Olimpia, donde confirmó estar consciente de los retos que conlleva haber fichado por los merengues.

Tres años de sequía para los blancos exigen que la meta primordial sea quedar campeones en el Apertura 2019 y así lo confirmó el defensor. «Es lo primero, desde que se presentó la oportunidad sabía a lo que venía, de no esperar tiempo para un resultado».

Leverón, sabe que la exigencia será fuerte, pues llega al equipo albo en un momento de mucha presión pues su directiva y afición exige títulos y romper la sequía de los mismos.

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El defensor completa en su palmarés su cuarto equipo denominado «grande» del fútbol hondureño. Llega procedente del Real España y antes militó en Marathón y Motagua. Ante esta estadística declaró que «lo más importante es lo que brindemos, lo que entreguemos, no me ha quedado grande nunca una camiseta, no por ser un equipo grande o pequeño, siempre sabiendo la responsabilidad y entrega que hay que dar día a día».

El central asegura que no le quedará grande la camisa blaca y que nunca le ha quedado amplia otra playera en los clubes que ha estado, su fórmula, ha sido la responsabilidad, trabajo y entrega.

«No me ha quedado grande nunca una camiseta, se a lo que vengo, no por ser un equipo grande, pasa por la entrega y responsabilidad que uno da a la institución».

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Su fichaje por Olimpia significa un paso importante en su carrera como futbolista, a sus 29 años Leverón quisiera volver a vestir la camiseta de la Selección Nacional de Honduras.

Al respecto comentó: «Lo primero es trabajar en el equipo, esa bendición llegará en su momento”, dejando claro que su objetivo principal es cumplirle a la directiva y a la enorme afición».