El pasado 17 de agosto murieron cuatro jóvenes previo al clásico capitalino que se suspendió por actos vandálicos en las afueras del Estadio Nacional

Tegucigalpa, Honduras

La Policía Nacional mediante allanamientos capturó a 11 jóvenes sospechosos del asesinato de cuatro aficionados en las afueras del Estadio Nacional, el pasado 17 de agosto, previo al clásico entre Olimpia y Motagua de la fecha cinco del torneo Apertura de la Liga Nacional.

La operación fue denominada «Paz en los Estadios», y la Policía detuvo a ocho jóvenes en el departamento de Francisco Morazán y tres en Choluteca.

Los disturbios provocaron la suspensión del partido, que registró un saldo de 11 personas heridas y cuatro perdieron la vida. Las víctimas son Carlos Fernando Alvarado Meza, Jefferson Banegas, David Antonio Zepeda Zúniga y Belis Antonio Baquedano Méndez, cuya saña con la que se cometieron los crímenes causaron un gran conmoción social.

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Los arrestados son: Bryan Josué González Mendoza (18), alias El Negro, originario y residente en el barrio Santa Cecilia de Comayagüela; Marco Antonio Cáceres Mendoza (21) alias Pelo Lindo, originario y residente en la colonia Australia de Comayagüela.

Además Ramón Eduardo Cruz Bonilla (24), alias El Chino, originario y residente en el barrio Sagrado Corazón de Jesús en Choluteca; Maverick Ariel Portillo Rueda (27) del barrio El Cortijo de Choluteca; Iván Alberto Umanzor Gómez (21) alias Benyamín del barrio Cabañas de Choluteca y José Jaime Godoy García (21)  de la Nueva Suyapa de Tegucigalpa.

También José Orlando Espinal Franco (21) conocido como Charly Espinal, originario y residente en la colonia Los Pinos de Tegucigalpa; Fabrizzio Alejandro Landaverde Urbina (28), alias Arroz, residente en la colonia Cerro Grande de Comayagüela; Emilser Missael Baquedano Zuniga (20) alias Michi de El Carrizal de Comayagüela.

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Denis Alejandro Hernández (30), alias Pangola, originario de Santa Rita, Yoro y residente en San Pedro Sula, así como Manuel Alejandro Rodríguez Medina (21), originario de Tegucigalpa y residente en el barrio Buenos Aires.

Las pericias coordinadas técnica y jurídicamente por el Ministerio Público, en coordinación con la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), confirman plenamente las identidades de los sospechosos, quienes fueron reconocidos mediante una serie de análisis de videos captados en cámaras de seguridad del Sistema 911 y a eso se suma la vinculación de los diferentes laboratorios y departamentos de Medicina Forense.

Tras las capturas, los acusados serán remitidos al Juzgado con Jurisdicción Nacional y los Fiscales de Instrucción de la FEDCV solicitarán la Detención Judicial respectiva.