A falta de tres jornadas para acabar la temporada, la pelea por la Bota de Oro está más viva que nunca. La evidente superioridad de los goleadores con respecto a los jugadores de otros campeonatos en las últimas temporadas ha provocado que España sea, actualmente, la referencia en la pelea por este galardón. Pero, ahora, un desconocido holandés de 27 años está dispuesto a plantar cara a Leo Messi, el gran favorito para ganar por cuarta vez este título individual.

Messi suma 33 goles en la Liga que, gracias a su coeficiente de 2 puntos, le otorgan 66 para liderar la clasificación por la Bota de Oro. Su gran temporada liguera le permite ser el primer clasificado en este ranquin, muy por delante de otros grandes goleadores como Robert Lewandowski (56 puntos), Pierre-Emerick Aubameyang (54), Luis Suárez (50) o Cristiano Ronaldo (40). Pero, entonces, ¿quién es su gran rival? Ni más ni menos que Bas Dost.

El delantero holandés se ha convertido en una de las grandes sensaciones de la temporada. Pese a ser un gran goleador en las últimas temporadas, sin duda este año ha sido el de su gran eclosión anotadora y, aun así, no ha conseguido ganarse el cartel de jugador conocido para el gran público. Fichado este verano procedente del Wolfsburgo para las cuatro próximas temporadas, el ariete holandés está demostrando ser un jugador de primer nivel.

Actualmente, Dost suma 31 tantos en la liga portuguesa, que también cuenta con un coeficiente de 2 puntos, lo que le permite tener 62 en total. Es decir, está a solo dos goles de Messi en el ranquin de la Bota de Oro.

Tanto a Barcelona como a Sporting de Portugal le quedan tres partidos para finalizar sus respectivos campeonatos, por lo que será una lucha muy igualada hasta el final. ¿Será capaz Bas Dost de dar la gran sorpresa?

Formado en la cantera del modesto Emmen holandés, sería en la temporada 2006-07, con sólo 16 años, cuando debutaría en segunda división. Sólo una temporada después, sus 7 goles en 23 partidos le llevaron a la Eredivisie tras fichar por el Heracles. Su primera temporada fue dura, donde sólo anotó tres goles, pero un año más tarde llegó su explosión: 15 tantos le permitieron dar un nuevo salto en su carrera, al marcharse al Heerenveen.

Un gran primer curso, con 13 goles, le llevó a confirmar su estatus de buen goleador, que refrendó con solvencia en su segundo año: 38 goles en los 39 partidos que jugó con el combinado holandés provocaron que los ‘grandes’ de Europa pusieran la lupa sobre él. Con sólo 23 años, daba el salto a la Bundesliga: el Wolfsburgo se hacía con sus servicios: 36 goles en 85 partidos le permitieron dar el último salto de su carrera hasta la fecha.

El Sporting se encontró con un problema en su delantera: su gran goleador, Islam Slimani, acababa de fichar por el campeón inglés, el Leicester. La directiva portuguesa se lanzó a por el holandés, quien tenía el “papelón” de sustituir al argelino, hasta entonces gran ídolo de la afición. Y lo ha conseguido con creces: con 31 goles en los 28 partidos de liga que ha jugado, tiene por delante tres partidos para derrotar al todopoderoso Messi.