La Justicia de Río de Janeiro bloqueó 64 millones de dólares de tres constructoras, entre ellas Odebrecht, y nueve funcionarios responsables por las reformas realizadas en el estadio Maracaná.

Las tres constructoras, que se completan con Andrade Gutiérrez y Delta, fueron denunciadas por irregularidades en la licitación y ejecución de las obras en el célebre estadio de Río de Janeiro para la Copa del Mundo de 2014.

Según sostiene la Fiscalía, la reforma del Maracaná de Río tuvo unos costes un 75 por ciento superiores a los calculados, y acabó saliendo por unos 385 millones de dólares, pese a que ya había sido remodelado en 2007 con motivo de los Juegos Panamericanos.

En su dictamen, el juez observó diferentes actos ilícitos desde la elaboración del proyecto inicial hasta el llevado a cabo finalmente.

El auto resaltó que hay indicios de que los valores de las obras eran inadecuados, así como la existencia de duplicidad de mano de obra y una fiscalización deficiente con unos costos elevados y sin justificar.

Además de las constructoras, están implicados en la causa el exsecretario de Obras del estado de Río de Janeiro, Hudson Braga y ocho funcionarios de la Empresa de Obras Públicas regional (Emop, por su sigla en portugués), entre ellos su expresidente Ícaro Moreno Júnior.

Según admitieron ante la Justicia exdirectivos del grupo Odebrecht, la mitad de los doce estadios de fútbol que fueron construidos o reformados en Brasil para el Mundial de 2014 tuvieron sobrecostes intencionados provocados por las propias constructoras para desviar dinero.

Los estadios bajo sospecha, además del Maracaná de Río de Janeiro, son el Mané Garrincha de Brasilia, la Arena Pernambuco de Recife, la Arena Castelao de Fortaleza, la Arena da Amazonia de Manaos y la Arena Corinthians de Sao Paulo.

Las supuestas irregularidades fueron conocidas en abril pasado con base en algunos de los testimonios de los 77 exdirectivos de Odebrecht, la mayor constructora de Brasil, en el marco de un acuerdo de colaboración judicial en el que confesaron las prácticas corruptas llevadas a cabo en la petrolera estatal Petrobras.