El MMA moderno y su evolución en el tiempo contribuyeron a volverlo en deporte de contacto

Tegucigalpa , Honduras

El MMA, también conocido como “Artes Marciales Mixtas”, es un deporte de combate, y de contacto pleno, que permite el uso de una amplia variedad de estilos y técnicas de pelea.  Las reglas contemplan tanto técnicas de golpe, como de sumisión, ya sea de pie, o en el suelo.  Así, en sus inicios, los combates en los torneos de MMA fueron protagonizados por competidores con muy diversa formación marcial (karateca contra judoka, boxeador contra jiu-jitsoka).

Pueden rastrearse a variadas competencias con mezclas de estilos que sucedieron en Europa, Japón y el Anillo del Pacífico durante principios del siglo XX.  El “Vale Tudo”, desarrollado en Brasil durante los años 20, más brutal y mucho menos regulado que el actual MMA, fue importado a EE.UU. por la familia Gracie, por medio de la fundación de la hoy inconfundible Ultimate Fighting Championship (UFC).  A su vez, algunas competencias profesionales de MMA se realizaron en Japón, bajo el alero de la desaparecida organización Shooto, en 1989.

Con el paso del tiempo, los peligrosos combates estilo Vale Tudo de los primeros eventos de la UFC fueron modificados, dando más seguridad a los peleadores, por medio de la implementación de nuevas reglas que han dado forma a lo que hoy conocemos popularmente como MMA.

Las competencias de MMA fueron introducidas a EE.UU. con el UFC 1.  Fue ahí cuando el MMA, como deporte, tomó importancia; cuando un enjuto Royce Gracie, practicante de BJJ o Jiu-Jitsu Brasilero (en ese entonces denominado Gracie Jiu–Jitsu) se coronó campeón del primer UFC, sometiendo a tres rivales de mucho mayor envergadura en una misma noche, en menos de 5 minutos en total.  Ello causó una revolución nunca antes vista en el mundo de las artes marciales.  Por otra parte, en Japón, Rickson Gracie, hermano mayor de Royce, se erguía como campeón de los campeonatos Shooto, y del primer campeonato bajo el alero de la promotora Pride, que por años sería acérrima rival de la UFC.

A comienzos de los 90, tres estilos de pelea se distinguieron por su efectividad práctica en los campeonatos de MMA: El Jiu-Jitsu Brasilero (incorporado por Royce Gracie y familia), la lucha libre amateur (en contraposición a la lucha libre profesional, como la WWF) y la lucha de sumisión.  Esto se atribuye a la faceta de lucha que caracterizan a dichas disciplinas, dado que ellas eran ampliamente desconocidas para los practicantes de otras artes marciales, comunmente enfocadas en los golpes y el impacto.

Los peleadores que combinaban el uso de la lucha con técnicas de golpe (boxeo, muay thai) solían tener éxito mientras la pelea se realizaba de pie.  Por su parte, los practicantes de BJJ tenían una significativa ventaja sobre los demás peleadores tan pronto la pelea llegaba al suelo.  Aquellos no familiarizados con la sumisión y la lucha  pronto demostrarían que no podían evitar caer ante las asfixias, llaves y luxaciones de los brasileros.

En la medida que los torneos comenzaron a hacerse más y más comunes, aquellos con una base en artes marciales de golpes comenzaron a ser más completos en la medida que se fueron familiarizando con los derribes y las posiciones de sumisión, lo cual derivó en notables e inesperadas victorias sobre los en ese entonces invencibles grapplers.

Por su parte, los luchadores fueron agregando técnicas de puño y patada a su arsenal, produciéndose así un alto desarrollo de cross training en este deporte, apareciendo así peleadores cada vez más completos y multidimensionales, capacitados para pelear en cualquiera de los diversos escenarios donde podía darse una pelea.

Pero para conocer un poco más de este deporte cada vez más seguido y practicado en nuestro país, Lemuel Licona, integrante de Buen Día Centroamérica de TEN Canal 10, nos cuenta en SPORTHIVA sobre esto en el reportaje de la parte superior. Fiel a su estilo y con su característico toque, Licona nos brinda más información sobre las artes marciales mixtas.