Los hinchas de Besiktas protestaron por la derrota ante Konyaspor en la final de la Supercopa

Turquía.

El Ministerio del Interior de Turquía abrió una investigación tras una escandalosa pelea que cerró la disputa de la Supercopa. Cientos de aficionados del Besiktas, campeón de liga, y del Atiker Konyaspor, ganador de Copa, se pelearon al final del partido.

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Los ultras de ambos clubes, que lanzaron bengalas y un cuchillo, burlaron la seguridad del estadio al terminar el encuentro, en el que Konyaspor se impuso por 2-1. La victoria se registró tras un gol de penal en el último minuto.

Rivalidad política en el fútbol

La rivalidad entre ambas aficiones tiene origen político. Los aficionados del Atiker Konyaspor cantaron contra la hinchada del Besiktas. Los acusaron de tener vínculos con el Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), que encabeza una rebelión de tres décadas contra el estado. La respuesta del equipo de Estambul fue con cánticos en los que les echaban en cara ser conservadores.

Al final, ambas facciones invadieron el campo de juego y se desató el desorden. Ahora, se investiga el salvaje enfrentamiento y ambos clubes esperan sanciones disciplinarias por parte de la Federación Turca de Fútbol.

La temporada pasada, el Atiker Konyaspor ganó su primera Copa de Turquía. Con esto rompió una larga hegemonía de los clubes de Estambul (Besiktas, Fenerbahce y Galatasaray). En tanto, el Besiktas ganó su segundo título consecutivo de al Superliga turca, el 15º en su historia.