Cierre de infarto en el Grupo F

 

Rusia

Primer tiempo de sufrimiento para México. Desde el minuto 1, sufrió la rigurosidad del árbitro argentino Nestor Pitana, quien amonestó a Jesús Gallardo.

Después, Guillermo Ochoa tomó la pelota sobre la línea de área, pero, para Pitana, lo hizo afuera, por lo tanto, falta indirecta para Suecia.

México se pudo sacudir de ese mal momento y tomó dominio del partido, aunque, sin tener cuidado en defensa, ya que en varios ataques, Ochoa debió hacer intervenciones.

La primera mitad, terminó con la sensación de buen juego mexicano pero que le pudo costar ir perdiendo.

En la segunda parte, la situación se complicó. En un centro al área, la pelota quedó suelta para el remate de Ludwing Agustinsson que Memo llegó a tapar pero sin la suficiente fuerza para detener el paso del balón.

 

Con este resultado, México no quedaba fuera, porque Alemania no estaba ganando a Corea, pero, mandaba a los mexicanos a jugar con el primero del grupo G, probablemente Brasil.

Venía lo peor. Los de Osorio no sabían ni marcar, puesto que Gallardo cometió falta dentro del área y Pitana no dudó. El capitán Granqvist, anotó desde los once pasos y todo se pintaba de negro para los Aztecas.

A 20 minutos del final, Edson Álvarez desmoralizó totalmente a sus compañeros con gol en propia puerta. Era un hecho, México al borde de la eliminación.

A todo esto, Alemania, no hacía las labores, Corea le ponía el candado en defensa y no los dejaba anotar.

El árbitro dio 6 minutos en Kazan, que sirvieron más para beneficio coreano y mexicano que para la Manchaft.

Jugada confusa que Kim anotó en posición adelantada, no obstante, el balón vino de Kross y la tecnología lo rectificó. Celebraba México porque Corea les daba la clasificación.

Neuer se fue con todo al ataque y dejó la portería vacía y en un robo asiático, la pelota fue mandada hacia el otro campo donde Heung Min dio el tiro de gracia.

Alemania eliminada de la Copa del Mundo. México pasa como segundo y Suecia, el impensado primer lugar.