Los albirrojos empataron 3-3 con los colchoneros en el Wanda Metropolitano y con el global 4-4 avanzaron a los cuartos de final

Madrid, España

El Girona logró un heroico 3-3 en las postrimerías del partido contra el Atlético de Madrid. Es la primera vez que los rojiblancos, con Diego Simeone en el banquillo, caen eliminados en unos octavos de final.

Se adelantó el equipo colchonero a los 12 minutos del encuentro, cuando Kalinic recibió un balón largo de Diego Godín para, tras un bote, fusilar a Iraizoz. El croata pudo poner el 2-0, pero el VAR (que fue protagonista en otras ocasiones del partido) lo anuló, ante su enfado.

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El joven Valery Fernández, canterano del Girona, se presentó al mundo con un golazo antes del descanso, cuando recibió un gran balón en el área pequeña para, de volea tras un gran control con el pecho, batir a un Adán que no pudo hacer nada.

Stuani tampoco faltó a su cita con este partidazo. El uruguayo remató de cabeza prácticamente solo, después de que Godín fuese derribado justo antes de que la falta botada que acabó en la cabeza del delantero del Girona. Las protestas de los jugadores del Atlético no fueron consideradas por Mateu Lahoz.

Con la eliminatoria en contra del Atlético, salió a relucir la fe colchonera. Necesitaban dos goles para darle la vuelta y el primero lo logró Correa, gracias a un gran disparo frente a Iraizoz al que batió en el uno contra uno. El VAR lo miró, porque podía haber fuera de juego, pero no lo anuló.

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Conforme pasaban los minutos, apareció en plan salvador Antoine Griezmann, que salió desde el banquillo. El delantero francés cazó un gran balón medido de Lemar para, casi sin ángulo, batir a Iraizoz para poner el 3-2.

Sin embargo, el Girona aún tenía una sorpresa. Borja García disparó con más fe que puntería para lograr la hazaña, y gracias a que tocó en Doumbia puso en el marcador el 3-3 que los clasificaba y dejaba elimiando al Atlético.