El jugador había revelado un día antes que padecía problemas cardíacos y que le habían aconsejado dejar el fútbol, pero hizo caso omiso

África

La muerte súbita ha vuelto a golpear el fútbol. Esta vez ha sido en África, concretamente en Suazilandia, en el partido entre Malanti Chiefs de Swazilandia y el Green Mamba en el Killarney Stadium, cuando al cuarto de hora de encuentro se desplomó el centrocampista burundés Papy Faty.

El jugador fue atendido en el momento, pero una vez desplazado al hospital sólo pudieron certificar su muerte. A sus 29 años, Faty había sido uno de los jugadores clave para que su selección clasificara para la Copa de África por primera vez en su historia.

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El propio jugador había revelado un día antes en una entrevista que en enero fue sometido a un chequeo médico donde le detectaron una enfermedad cardíaca, y los médicos le aconsejaron someterse a una operación o dejar al fútbol.

Faty, de 28 años, desobedeció los consejos médicos y continuó con su pasión, pero falleció debido a un infarto en pleno partido.