Es el único jugador de Primera y Segunda División que se ha negado a hacerse pruebas y a volver a los entrenamientos por «miedo» al virus. Lo hará «cuando haya una vacuna»

España

La pandemia del coronavirus aparte de afectar el estado físico de los futbolistas en algunos casos ha tocado la parte mental, tal es el caso del jugador del Cádiz de la segunda división de España, Rafael Giménez Jarque, conocido futbolísticamente como «Fali».

El defensa del conjunto amarillo es el único futbolista que se ha declarado en rebeldía y se niega a volver a los entrenamientos, hasta que no haya una vacuna para la enfermedad. «No pienso jugar al fútbol y no voy a cobrar», asegura el futbolista.

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Fali, al igual que el hondureño Anthony Lozano, llegaron el año pasado al Cádiz como refuerzos del club para buscar el ascenso a primera división.

Según experto es psicología el zaguero padece del «Síndrome de la Cabaña», que es el miedo absoluto a salir del confinamiento. Alberto Cifuentes, capitán del Cádiz, opina que su compañero debe de buscar ayuda y estar tranquilo, pues toda la plantilla ha salido negativas en los text.

«No he hablado personalmente con Fali. Su decisión es totalmente respetable por supuesto, lo único que con el vestuario que tenemos con gente tan cercana y madura nos podría haber pedido ayuda antes y se podría haber sentido arropado por nosotros. A lo mejor no lo hubiéramos hecho cambiar de decisión porque él tiene miedo, pero se habría sentido arropado por sus compañeros y a lo mejor estaría en otro momento distinto al que está ahora”, explica el capitán.

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La directiva del Cádiz todavía no se pronuncia sobre la negativa del futbolista de entrenar.

Rafael Giménez Jarque es de origen humilde. Su padre es chatarrero, «siempre he sido pobre», cuenta él mismo, por lo que no duda en anunciar que renuncia a cobrar un céntimo mientras siga sin entrenar y sin jugar. “El presidente me ha querido pagar, pero le he dicho que no, si yo no juego, no cobro. Si me manda mi nómina, la devuelvo», expresa sin tapujos.