El técnico argentino fue entrenador del FC Barcelona en la temporada 2013-2014 donde logró la Supercopa de España y se marchó después de no ganar la Liga, la Copa ni la Champions

Buenos Aires, Argentina

El barcelonismo recuerda la temporada 2013-14 como una de las peores en lo que va de siglo. Tras vivir cuatro años gloriosos con Pep Guardiola y la Liga de los 100 puntos con Tito Vilanova, el FC Barcelona se quedó casi en blanco.

El equipo, dirigido aquella temporada por Gerardo «Tata» Martino, dejó escapar la final de Copa contra el Real Madrid y la Liga ante el Atlético de Madrid en la última jornada. El conjunto colchonero se convirtió en su gran rival esa temporada, ya que también les dejó fuera en los cuartos de final de la Champions.

Solo la Supercopa de España salvó a los culés de una temporada sin títulos. No obstante, prácticamente toda la hinchada culpó de este año horrible al técnico argentino.

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Martino no guarda un buen recuerdo de su paso por el FC Barcelona. El argentino ha asegurado que, pese a que el equipo obtuvo la Supercopa y disputó la final de la Copa del Rey, el de su estancia en el Camp Nou fue el peor año de su carrera profesional.

Desde el lado de los resultados no fue un mal año. Ganamos un título (la Supercopa) y jugamos una final, pero en Barcelona lo que importa es cuántos títulos ganas. Sin embargo, yo digo que fue mi peor año porque mi aporte como entrenador iniciaba y terminaba con la gestión del equipo», indicó en declaraciones que recoge diario AS de España.

Eso sí, el actual seleccionador de México quiso poner en valor el hecho de que fue el primer entrenador que trató de explotar otras virtudes del equipo más allá del toque y la posesión, y aprovechar así la rapidez de sus arietes, como Lionel Messi, Alexis Sánchez, Pedro y Neymar.

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«Para mí fue clave el clásico con el Real Madrid que ganamos por 2-1 en casa. El segundo gol lo hacemos corriendo al espacio y si el Barcelona corría al espacio era porque algo no terminó de cuadrar. Pero yo entendía que si algo podríamos agregarle al equipo era no negarle la posibilidad de correr», explicó.

No obstante, reconoció que sus nuevas aportaciones no fueron bien recibidas en el Camp Nou, ya que al día siguiente se hablaba más del juego del equipo que de la victoria en si. «La velocidad iba a hacer al Barcelona más completo porque cuando hubiera lapsos de dominio del equipo rival, estaba bueno esto de retroceder y salir al espacio. Eso lo llevaron a cabo al año siguiente con Luis Enrique», sentenció Martino.