El expreparador de porteros del Manchester United, reveló que Ferguson odiaba que Cristiano exagerara cuando era víctima de faltas

Manchester, Inglaterra

Sir Alex Ferguson es considerado como el padre deportivo del delantero portugués del Real Madrid, Cristiano Ronaldo. El técnico escocés lo descubrió como gran promesa en Portugal y se lo llevó a Manchester donde pulió su talento e hizo el crack que hoy es.

Pero el proceso, según cuenta Tony Coton, expreparador de porteros de los Diablos Rojos, no fue nada fácil. Incluso, se atrevió a revelar para el Daily Mail qué métodos usaba Ferguson con el chico y lo que odiaba de su joven estrella.

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No le hacía gracia al técnico del United la tendencia natural de Cristiano Ronaldo, entonces a sus órdenes, de dejarse caer en el área. «Odiaba que cayera como una muñeca de trapo cada vez que perdía un duelo contra su marcador».

Por eso, Ferguson decidió acabar con esta antideportiva costumbre del portugués, muy mal vista en el fútbol inglés. Recomendó a su cuerpo técnico dejar pasar las faltas y las patadas que recibiera durante los partidos de entrenamiento para fortalecerlo mentalmente.

Cuenta Coton que Cristiano se enojaba cuando era víctima de patadas y no señalaban falta. Así fue aprendiendo a esquivar a los contrarios. Eso no ha cambiado mucho con el paso de los años. Ahora es difícil ver a Cristiano perder un duelo con un rival.

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Esta fue la manera en la que «Ferguson le demostró su cariño al portugués». Cristiano ahora se lo agradece, incluso lo considera como su segundo padre.

El paso de CR7 por la Premier League dejó el recuerdo de un buen goleador y de un excelente actor simulando faltas que no eran para justificar sus pérdidas de balón. En Inglaterra eso estaba mal visto, en España esa capacidad interpretativa de la vedette portuguesa ha servido para acrecentar su leyenda.