«Salud y gracias por no olvidarme», dijo Diego en una foto que compartió en su cuenta de Instagram

El 30 de octubre no es una fecha más porque el que celebra un año más de vida es nada menos que Diego Armando Maradona. El astro argentino cumple  57 años pero él los celebra desde la lejana Dubai, donde ya es 30.

Diego compartió una imagen en su cuenta de Instagram y les agradeció a «los de siempre».

Era recogepelotas en Vélez en un Argentinos-Boca y La Doce bramó “que se quede, que se quede….” después de sus malabarismos de 15 minutos del entretiempo. Era Cebollita. Desconocido. Emigrante de Fiorito a Paternal, con “todo el futuro por delante” como decía Muñoz. Fue en Vélez el día de los cuatro goles a Gatti después de que lo llamara Gordito. Y fue el tobillo hecho maceta en Trigoria y el jueguito con la pelota de golf o de tenis en el Babson de Boston. Y fue la Bombonera. Y el Camp Nou, Y Wembley. Y el Azteca. Y fue el departamento de la calle Franklin. Y fue la clínica Cantegril de Punta del Este, cuando casi se va antes de tiempo. Y fueron las mujeres. Y los hijos. Y la tele. Y los diarios. Y el dinero. Y los árabes. Y aquel partido con Menem, también en Liniers. Y fue la lengua filosa que hizo que Pelé debutara con un pibe y que Macri fuera el Cartonero Báez antes de que los goles de Palermo lo iniciaran en el camino a la Presidencia. Y fueron reyes. Y fueron Papas. Y fue Fidel. Y fue Cristina. Como si fueran lo mismo.

No resulta sencillo resumir en pocas imágenes la notable carrera de Diego Armando Maradona. Al margen de que también es un abonado histórico a los escándalos mediáticos, si en el repaso sólo se pone el foco en lo estrictamente deportivo, tampoco resulta una tarea fácil resumir una carrera plagada de logros, momentos inolvidables para la historia del fútbol y hecho que quedarán grabados para siempre en la memoria de los futboleros del mundo entero. En un repaso que podemos hacer, recordamos al título del mundo con Argentina en el Mundial de México en 1986, el punto máximo de su carrera. Una foto grafica la vuelta olímpica con el trofeo del mundo manos y las otras dos, la carrera para el mejor gol de la historia de los mundiales y la famosa “Mano de Dios”, ambos goles ante Inglaterra. La entrega del Balón de Oro en 1981, posando con el trofeo de la Copa de la UEFA con el Nápoli y la vuelta olímpica con Boca en el Metro de 1981.