Evangelos Marinaki dejó entrever la molestia que tiene con los futbolistas después de que su equipo no pudo ganarle al Levadiakos

Grecia

El fútbol de Grecia, donde milita el hondureño Alfredo Mejía, está pasando por un duro momento. Primero el presidente del PAOK ingresó al campo de juego con un arma. Ahora, se suma la insólita decisión que tomó el presidente del Olympiakos.

El dirigente Evangelos Marinakis sancionó a sus jugadores con 400.000 euros de multa y les mandó «de vacaciones» hasta el final de temporada tras el pobre desempeño en el campeonato griego.

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Marinakis, que también es propietario del Nottingham Forest (equipo de la segunda división inglesa), se enojó tras el empate 1-1 contra el Levadiakos, que deja al aún campeón griego en la tercera posición de la tabla clasificatoria.

«Construiré el Olympiakos desde el inicio y haré el equipo que todos estamos soñando. Los aficionados y yo ya hemos aguantado bastante. Márchense hoy y váyanse de vacaciones», dijo el presidente a sus jugadores según la prensa griega.

El dirigente habría añadido que muy pocos jugadores disputarán los últimos tres partidos de la temporada, sustituyéndolos por futbolistas del filial.

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«Ellos aman al Olympiakos y a sus hinchas mucho más que ustedes (…) Solo piensan en la bellas casas en las que viven y en los coches y no se preocupan del equipo», insistió Marinakis, que dijo que el dinero de la multa lo invertirá en pagar las sanciones por jugar con los futbolistas del filial.

«Pago millones para que lo tengan todo. Por ustedes he despedido a tres entrenadores y al final parece que ustedes eran los responsables», había añadido el dirigente muy molesto.