Los fans del Malmö no se han tomado nada bien la noticia de que Ibra será copropietario del Hammarby sueco

Suecia

Los aficionados del Malmö no han perdonado que Zlatan Ibrahimovic se haya convertido en copropietario del Hammarby de Estocolmo. La rivalidad entre los dos equipos suecos ha acabado con varios radicales del Malmö, donde se formó y jugó el futbolista, atacando su estatua,  que amaneció este jueves con la cara cubierta con un plástico azul y un asiento de inodoro colgado de un brazo.

Además, en el suelo apareció una frase racista en referencia a los orígenes bosnios del futbolista. «Cigani (Gitanos)», se leía. En la base del monumento, dejaron una pancarta en que sugerían que la estatua fuese trasladada a Söder, el barrio del Hammarby en el capital. La escultura, de 3,80 metros, fue un regalo de la Federación sueca a su máximo goleador histórico y fue inaugurada el pasado mes de octubre.

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La estatua no fue el único emblema dañado. También a una casa propiedad de Zlatan en el centro de Malmö, ciudad donde nació, le pintaron con un aerosol la palabra «judas».

Según el tabloide Aftonbladet, ya se han tomado medidas para proteger la estatua, que tras los incidentes ha sido vallada y se colocó guardia de seguridad privada.

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Ibrahimovic, de 38 años, siempre se ha mostrado muy unido a su ciudad natal, aunque ha rechazado públicamente en varias ocasiones que vaya a volver a jugar en el fútbol sueco y en el Malmö.

El exjugador del Ajax, Milan, Inter, Juventus, PSG, Barcelona y Manchester United anunció hace unas semanas su marcha del LA Galaxy, aunque no ha revelado su próximo destino. El miércoles se confirmó que había comprado el 25 % del Hammarby.