Esta iniciativa se desarrolló después de las quejas de los futbolistas y exfutbolistas por las faltas de respeto que sufren de manera online

Londres, Inglaterra

La Premier League anunció que impulsa una plataforma que permite a jugadores, entrenadores, dirigentes o miembros de sus respectivas familias denunciar los insultos con carácter discriminatorio de los que sean víctimas en las redes sociales.

«Cada caso será estudiado, señalado a la plataforma en cuestión y será objeto de una investigación. Y si es necesario, de una acción judicial», explicó la Premier League en su comunicado.

«Los insultos discriminatorios (racistas, sexistas u homófobos, entre otros) en internet son inaceptables, sean cuales sean las circunstancias. Enfrentarse a ellos debe ser una prioridad», explicó Richard Masters, patrón de la Premier League.

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«Hay demasiados casos en los que futbolistas y sus familias reciben lamentables insultos con carácter discriminatorio y nadie debería tener que sufrir eso», añadió.

El exatacante internacional inglés Ian Wright, que es actualmente comentarista para la BBC, denunció recientemente los insultos racistas que recibe «diariamente», sobre todo por su apoyo al movimiento Black Lives Matter.

En mayo, un adolescente irlandés que le había enviado mensajes privados racistas que el exfutbolista había redifundido se entregó a la policía.

Entre diversos términos racistas contra el exjugador, que tiene ahora 56 años, este adolescente le había dicho: «Si pillo el corona (virus), te voy a toser en la cara, te daré tu condena de muerte».

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«Sé que no debería ni verlos, pero esos mensajes me golpean muy fuerte. ¡Es un niño! Ese chico tiene línea directa hasta mí y puede enviarme eso sin ningún problema», había escrito Wright cuando publicó las capturas de pantalla de los mensajes recibidos.

Al principio de la temporada, los jugadores del Manchester United Paul Pogba y Marcus Rashford o del Chelsea, Tammy Abraham, habían sido objeto de insultos racistas después de haber fallado penales.

La red social Twitter se comprometió a reunirse con representantes del Manchester United, reconociendo que podía «hacerlo mejor para proteger a los usuarios».

«Los comportamientos racistas no tienen espacio en nuestra plataforma y los condenamos fuertemente», añadió entonces Twitter.