El expresidente de Fenafuth anuncia su regreso al país tras cumplir la sentencia del FIFA-Gate de dos años ya pagados

Tegucigalpa, Honduras

El expresidente de la Federeación de Fútbol de Honduras y de la Concacaf, Alfredo Hawit Banegas, tras conocer su sentencia de dos años de libertad supervisada, emitió un mensaje a sus familiares y que se ha filtrado en los medios, donde manifiesta su alegría e informa que está en busca de un vuelo para regresar al país.

Muy lúcido y alegre por salir bien librado, Hawit agradece el apoyo y lamenta no haberles avisado porque esta era una sentencia extraordinaria que solamente Dios la preparó. «Diosito tenía todo listo”, dijo el exdirectivo a sus parientes vía WhatsApp.

Vea además: Alfredo Hawit es sentenciado a dos años de libertad supervisada por caso FIFA Gate

«Ya mi sentencia es tiempo cumplido con libertad de dos años en Honduras y no importa lo que la prensa pong, lo que la gente diga. Hemos sido buenas personas, pero vamos a hablar de eso después. Les agradezco a toditos, porque no voy a tener tiempo de hacerlo a todos. Solamente quiero decirles que sigamos orando, que sigamos cuidándonos porque la situación no es buena en ninguna parte del mundo. Lo importante es que nos cuidemos, que compartamos cuando llegue a Honduras».

El hondureño de 68 años, fue detenido en Zúrich, Suiza a principios de diciembre de 2015, antes de ser extraditado y encarcelado en Estados Unidos y luego puesto bajo arresto domiciliario.

Le interesa también: Familiares y exmundialista de España 82 reciben el cuerpo de Roberto «Macho» Figueroa

En abril de 2016 se declaró culpable de cuatro cargos dentro del amplio escándalo de corrupción en el órgano rector del fútbol mundial, que incluían asociación ilícita, fraude electrónico y conspiración para obstruir la justicia.

Alfredo Hawit fue autorizado este lunes a regresar a su país por una jueza estadounidense, más de cuatro años después de haberse declarado culpable en el escándalo de corrupción conocido como FIFAgate.

Aunque formalmente estará en libertad condicional durante otros dos años, con la obligación de responder a cualquier solicitud del sistema de justicia de Estados Unidos y la prohibición de realizar funciones relacionadas con el fútbol.