San Petersburgo, Rusia

El Betis consiguió un triunfo muy trabajado frente al Zenit de San Petersburgo (2-3) en la ida de los dieciseisavos de final de la Liga Europa en un partido plagado de alternativas, que da ventaja al conjunto español para la vuelta de la próxima semana que se disputará en el Benito Villamarín.

El equipo verdiblanco había visitado Rusia en dos ocasiones en toda su historia y nunca fue capaz de ganar. Este jueves, sumido en una dulce dinámica -donde todo fluye a pedir de boca- alargó su excelente racha y pudo quitarse la espina para elevar a siete las victorias conseguidas en los últimos ocho partidos.

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El conjunto dirigido por Manuel Pellegrini jugó con su habitual valentía y pronto obtuvo premio en el marcador. Una falta botada por Joaquín desde el costado derecho fue cabeceada por Guido Rodríguez para convertir el 0-1 a los 8 minutos. Una ventaja merecida al atrevimiento de las ‘Trece Barras’, que se dobló pasado el cuarto de hora.

En esta ocasión fue Willian José quien batió a Mikhail Kerzhakov después de una conducción de casi 20 metros que culminó con un derechazo desde fuera del área que entró a ras de césped. El Betis vivió sus mejores momentos en un arranque fulgurante que no tuvo contestación del Zenit hasta casi la media hora.

Los rusos encontraron el gol en su primer acercamiento en botas de Artiom Dziuba y enloquecieron un partido sin orden defensivo donde pudo pasar de todo. De un momento a otro, el gol local dio poder a un Zenit que fue capaz de todo en tres minutos. El Betis no se plegó y rozó el tercero pero acabó encajando el empate (2-2) en una acción del exbarcelonista Malcolm. Un jarro de agua fría que tuvo pronta reparación.

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Y fue por culpa del portero del Zenit, que realizó una mala entrega a pocos minutos para el descanso y regaló la posibilidad de hacer el 2-3 a Andrés Guardado, asistido por un sobresaliente Aitor Ruibal, que definió con talento en su primer gol de la temporada. Un tanto que hizo justicia a la apuesta de los verdiblancos.

En la segunda mitad, también con diferentes ocasiones para ambos conjuntos, la más clara fue un disparo cruzado de Ruibal, mientras que los de Sergey Semak no aprovecharon un barullo final para sacar tajada en el área. El resultado no se movió y el Betis vuelve a España con un botín que puede ser más que suficiente dentro de siete días en busca de los octavos de final.