París, Francia

El viaje de Lionel Messi a Arabia Saudita parece haber generado un fuerte malestar en el plantel del París Saint Germain, que este lunes 1 de mayo por la mañana se entrenó con normalidad tras la derrota del domingo como local ante el Lorient por 3-1.

Luego del partido, el argentino viajó con su familia hacia Medio Oriente y allí fue recibido por autoridades locales, ya que tiene acuerdos comerciales con el gobierno local.

Su arribo a Arabia generó una revolución en la gente, que lo recibió en las redes sociales con el hashtag #HolaMessi. Incluso, los encargados de gobernar el país también se sumaron a los saludos a Leo por las redes.

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«Me complace dar la bienvenida al Embajador de Turismo, Lionel Messi, y a su familia en sus segundas vacaciones aquí. Estamos felices de compartir nuestra auténtica bienvenida saudita con todos ustedes», escribió Ahmed Al Khateeb, Ministro de Turismo árabe.

Según reveló el diario deportivo francés L’Equipe, Messi no tenía permiso para viajar. Porque el cuerpo técnico liderado por Christophe Galtier había anunciado horas antes del partido que el plantel tendría dos días de descanso sólo si ganaban ante Lorient.

Con la derrota, la comunicación oficial que el departamento de comunicación del PSG envió a los medios de prensa indicaba que los jugadores tenían una sesión de entrenamiento el lunes 1 de mayo a las 11 de la maya. Y recién descansarían el martes 2. Una decisión que se tomó, justamente, para evitar salidas al extranjero.

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Messi comunicó que no podía posponer su compromiso con Arabia Saudí, se aferró a los planes originales y decidió viajar igual, a pesar de que sus compañeros tuvieron que cancelar su lunes libre para ir a entrenar.

Esta situación generó cierto malestar en todo Paris Saint-Germain. ‘L’Équipe’ afirma que el argentino volverá al club este miércoles y que tendrá una conversación con los directivos para aclarar el malentendido.

Una nueva tensión entre el club parisino y el futbolista rosarino, que siguen sin encontrar sintonía en un momento clave de la temporada, donde el PSG busca ganar el título de Ligue 1 y Messi aún no sabe en qué equipo jugará a partir de la próxima campaña.