Londres, Inglaterra

Se acabó, por fin, el drama del Chelsea en su búsqueda de entrenador de cara a las próximas temporadas: Mauricio Pochettino se encargará de dirigir al conjunto londinense a partir de la temporada próxima.

Como ha avanzado en exclusiva Fabrizio Romano, el argentino firmará en los próximos días su contrato de larga duración, aunque no se incorporará hasta llegar a junio, cuando finalice la temporada, con Frank Lampard, interino en el cargo desde la salida de Graham Potter, a comienzos de abril.

Se espera que el equipo de trabajo del argentino incluya a su antiguo asistente, Jesús Pérez, además del entrenador del primer equipo Miguel D’Agostino, el entrenador de arqueros Toni Jiménez y su hijo, Sebastiano.

Aunque Pochettino, de 51 años, no comenzará a trabajar formalmente hasta dentro de varias semanas, se espera que discuta los objetivos del mercado de pases con los copropietarios Todd Boehly y Behdad Eghbali antes de lo que probablemente será un período movido en Stamford Bridge.

El club necesita deshacerse de varios jugadores, ya que hay 31 futbolistas en el primer equipo, sin tener en cuenta a los que regresarán a Londres después de sus préstamos. Pochettino, sin trabajo desde que dejó el Paris Saint-Germain el año pasado, participará en la identificación de jugadores que se consideren prescindibles.

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El técnico argentino dirigirá a su compatriota Enzo Fernández, por quien el Chelsea le pagó 121 millones de euros al Benfica después del Mundial de Qatar, estuvo muy vinculado con un posible regreso a Tottenham, su antiguo club, después de que despidieran a Antonio Conte, pero las fuentes dijeron que nunca se contactaron con él oficialmente.

Pochettino enfrenta una tarea difícil para mejorar el momento del Chelsea, que gastó alrededor de 600 millones de libras esterlinas desde que Boehly y Clearlake Capital completaron su adquisición en mayo del año pasado solo para despedir a dos entrenadores en el camino hacia una probable posición por debajo de la mitad de la tabla de la Premier League. Actualmente, los Blues ocupan el undécimo puesto, con tres partidos por disputar después del empate 2-2 del sábado ante Nottingham Forest en casa.