Su relación en la selección española está rota totalmente

Madrid, España

La relación cordial que existe entre Sergio Ramos y Gerard Piqué en el seno de la selección española está a borde de la ruptura sino es que se ha roto ya. El posicionamiento del central del FC Barcelona ante el referendum y sus declaraciones tras los altercados de Cataluña del pasado 1 de octubre («La selección no es una competición de patriotismo») han provocado el enfado del capitán del combinado nacional.

Ayer medios como EcoDiario y Diario AS  se hicieron eco de las informaciones que apuntaban a ese malestar previo a la concentración de España. En el inicio de esa concentración, siguió lloviendo sobre mojado. Piqué retuiteó algunos mensajes contrarios a la actuación de la Policía y la Guardia Civil durante la jornada del 1 de octubre y eso molestó a Ramos.

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Minutos después de llegar a Las Rozas, Julien Lopetegui mantuvo una reunión con los jugadores, Piqué y Ramos incluida y ahí saltaron chispas. La presión sobre Piqué ha empezado y es fuerte.

Desde fuera y desde dentro de la selección. Uno de los asistentes en esa reunión afirma que no sería descartable que Piqué renunciase a ‘La Roja’ antes del viernes, cuando jugará contra Albania.

Fuentes cercanas a Piqué insisten en que esto no sucederá. Piqué sólo se irá si se lo pide Lopetegui o la Federación.

Entre tanto, el futbolista ha continuado retuiteando mensajes de índole política. Lo ha hecho esta noche y, seguramente, lo siga haciendo a lo largo de los próximos días.