Un jugador con potencial para liderar al cuadro blanco, pero también una apuesta con algunas dudas indiscutibles

Madrid, España

Veíamos ayer que las estadísticas de Neymar en Ligue 1 esta temporada se encuentran fuera de toda duda. 15 partidos, 15 goles y 11 asistencias para el brasileño. Una cifra brutal que pone de manifiesto la existencia de una gran diferencia entre el PSG y el resto de sus rivales en Francia actualmente.

En el horizonte del atacante está el Real Madrid, al que se enfrentará el 14 de febrero. Y también podría estarlo como destino soñado para verano o para el año 2019, quién sabe. Aunque, según Marca, su llegada plantea algunas dudas, esencialmente extradeportivas, a la hora de realizar una apuesta de este calibre.

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Dejando aparte sus episodios en el FC Barcelona, desde su llegada hasta su turbulenta salida, pasando por expulsiones, huidas a Brasil, y otros comportamientos cuestionables en el campo; en Francia ha protagonizado ya varios en apenas unos meses. Su pelea por un penalti con Edinson Cavani, su expulsión ante el Olympique de Marsella, sus diferencias con Unai Emery o los pitos que escuchó el miércoles en el Parque de los Príncipes.

Varias polémicas en apenas medio año, que han logrado sacudir a su club y hacer que se multipliquen las especulaciones sobre su salida. Hoy de nuevo su entrenador ha acudido en rueda de prensa a sofocar el último fuego con sus declaraciones.

«Cualquier cosa que sucede incluso en equipos de aficionados cobra una mayor importancia. El rol de los penaltis está claro y el equipo está unid»o, ha insistido el vasco, antes de asegurar igualmente que no ve a Cavani lejos de su escuadra.