Londres, Inglaterra

El Liverpool clasifica por primera vez desde el 2015, a la semifinales de la FA Cup al superar (1-0) al Nottingham Forest en el The City Ground y jugará contra el Manchester City por un boleto a Wembley. Mientras en la otra semifinal del torneo más antiguo del mundo, la disputarán Chelsea y Crystal Palace.

Las estadísticas mostrarán que el Liverpool tuvo la mayor parte del balón y la mayoría de las ocasiones. Sin embargo, los momentos realmente importantes, los que decidieron este juego, llegaron al final y el resultado fue justo, pese a que fácilmente podría haber caído en la dirección del equipo de segunda división.

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Jürgen Klopp hizo descansar a los jugadores como Mohamed Salah y Sadio Mane. De hecho, ninguno de los dos estuvo siquiera en el banquillo. Y fue un suplente fiable, Diogo Jota, quien marcó el gol de la victoria tras un magnífico centro de Kostas Tsimikas cuando quedaban 12 minutos del tiempo reglamentario.

Primero, dos minutos antes del gol de Jota, el danés Philip Zinckernagel desaprovechó una ocasión igual de buena en el otro extremo. Si hubiera marcado, el Liverpool habría tenido  poco tiempo para encontrar la remontada.

Luego, mientras Forest perseguía la paridad con entusiasmo al final, Ryan Yates no pudo vencer a Alisson Becker con un cabezazo justo cuando parecía que debía hacerlo. Hubo una apelación de penalti, correctamente rechazada, en medio de todo el drama, lo que significó que cuando Klopp y sus jugadores llegaron a tiempo completo, estaban más que listos para volver a casa.

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Forest ya había vencido al Arsenal y al Leicester aquí en rondas anteriores y habrá visto las cintas. Lo que no hizo ningún equipo de la Premier League fue arrancar rápido y el Liverpool parecía empeñado en no ser así.

El equipo de la Championship realmente creó la oportunidad de la primera mitad del juego; el mediocampista central James Garner no pudo controlar su tiro cuando la oportunidad se presentó en el segundo palo. Después de eso, Liverpool logró controlar más el juego.

En dos ocasiones, los jugadores del Liverpool corrieron despejados al gol en la primera media hora. Primero lo hizo Diogo Jota en el minuto diez solo para ser derribado por el capitán del Forest, Joe Worrall. Y luego, en el minuto 28, Roberto Firmino también se coló en el gol tras un desliz de James Colback para fallar con un ambicioso chip sobre Ethan Horvath cuando el portero apostó por mantenerse erguido.

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Sin embargo, los Reds manejaron mejor el desenlace del partido y neutralizaron el envión que imprimió la afición local a los suyos.

Nuevamente el Liverpool ganó con lo justo y sigue en carrera por la Premier League y ahora buscará lograr la FA Cup, antes deberá dejar en el camino a su acérrimo rival en el campeonato inglés; el Manchester City.